Soy ya casi una voluta de humo,
leña consumida por el fuego,
me desvaneceré sin saber nunca cómo era,
en qué consistía ese juego perverso.
Aparecer, desaparecer,
ni siquiera un rastro de migas para seguirlo..
Sin ganas ya de comprender,
atosigada por las evidencias,
las apariencias, las vivencias,
cansada de fabular posibilidades,
abrumada por la realidad
que es la única que espera,
te devora y acecha.
Soy ahora lo que nunca imaginé ser,
un refugiado caminando sin horizonte
y el tiempo y la vida asolando
la posibilidad de creer que lo que soñabas
sería verdad algún día.
Clara Serrano
Clara Serrano