lunes, 4 de octubre de 2021

DISFRUTAR DE LA ETERNIDADD



«Seguí vuestro consejo, mirza Esther. No dejé escapar ninguna oportunidad. 
Nunca dudé en ir allí donde mi curiosidad me llamaba. 
De buena gana fui a donde había peligro en la belleza y belleza en el peligro. 
Como presagiasteis, he tenido gran cantidad de experiencias. Muchas fueron deliciosas, otras instructivas, unas cuantas ojalá me las hubiera evitado. Pero las tuve, y aún las tengo en la memoria. 
Si mañana mismo he de ir a mi tumba, no será ésta un agujero negro y silencioso. Puedo pintar la oscuridad de brillantes colores y llenarla con música marcial o lánguida; con el centelleo de las espadas y el susurro de los besos; con sabores, emociones y sensaciones; con la fragancia de un campo de tréboles calentado al sol y regado por una lluvia amable, la cosa de más dulce aroma que Dios puso sobre esta tierra. 
Sí, puedo animar la eternidad. Otros quizá tengan que soportarla; yo puedo disfrutar de ella. Por eso os doy las gracias.

Clara Serrano